10. Saturación, psicoacústica y espacio

„Distorsión“ suena a música de guitarras o a „roto“. Pero también en Mastering se toman distorsiones como objetivo. Especialmente válvulas y transmisores son componentes que generan armónicos, y estos son percibidos por el oído como cálidos y agradables. Para conseguir una mezcla algo mas „densa“, se generan distorsiones armónicas conscientemente. Esto, que en la mayoría de los casos se acompaña con una forma de tratamiento con compresión, es un efecto secundario positivo.

u-he Satin ofrece una convincente simulación de máquina de cinta magnética que también puede ser interesante en Mastering.

Actualmente es muy popular el empleo de Plug-Ins, que reproducen secciones de Mastering de grandes y costosas mesas analógicas. Pero son muy especiales las máquinas de cinta magnética de Mastering, que proporcionan resultados sónicos con un encanto especial. Quien no se pueda permitir hacerse con una de ellas, hoy en día tiene la alternativa de optar por muy buenos Plug-Ins, que emulan la completa ruta de señal hasta la banda magnética – incluyendo todas las variaciones de nivel, la respuesta en frecuencia de fase y los efectos de saturación y compresión.

Este tipo de efectos en su mayoría se incluyen entre los efectos psicoacústicos, es decir, los que aprovechan con habilidad las particularidades del comportamiento del oído. Uno de los géneros especialmente utilizados son los limitadores psicoacústicos. Se trata fundamentalmente de un Limiter multibanda, que puede maximizar la energía en rangos de frecuencia separados, que el oído también analiza por separado. De esta forma la impresión de volumen puede aumentar enormemente, por tanto hay que mantener la mesura aquí, porque más tarde o más temprano pueden aparecer efectos secundarios indeseados como el clipping, que haría tornar el sonido áspero y desagradable.

Para no necesitar proporcionar demasiada energía a los graves más profundos, pero sin dejar de tener suficiente presión, se emplea otro truco de la psicoacústica: El oído es capaz de reconstruir un sonido fundamental ausente de la señal, porque físicamente visto pertenece a ella. Este efecto residual se encarga, por ejemplo, de que podamos escuchar los tonos más graves de un contrabajo, aunque el instrumento apenas solo esté dando los armónicos correspondientes. Un Bass-Enhancer es útil en estos casos, generando armónicos y minimizando el tono fundamental.

Para los que piensen que en el Mastering una Reverb está de sobra: ¡No es así! Una Reverb, aplicada de forma austera y objetiva, puede generar con las reflexiones un "espacio homogéneo" a la mezcla. Además puede comprimir una cola de Reverb y proporcionar "empastado" entre instrumentos.

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