5. Tambores de mano

Los Bongos (también el bongó) son los tambores de mano más populares. Son de origen afro-cubano, y parte del legado de los esclavos africanos traídos al caribe como tantas otras percusiones. Se utilizan siempre en parejas y tienen con una forma ligeramente cónica, con parches de piel o sintéticos en la parte superior y abiertos por debajo. El casco tradicionalmente estaba hecho de madera, pero hoy en día se construyen en otros materiales como el metal, la fibra de vidrio u otros materiales sintéticos. Se afinan de forma diferente, con separaciones de tercera o quita, siendo el macho el diámetro pequeño y la hembra el grande.

Los bongos se tocan con partes de la palma de la mano como el pulpejo y las yemas de los dedos en diferentes técnicas, también se usan mazos o baquetas de timbal. Las técnicas de interpretación virtuosas con superficies de la mano y juegos de dedos pueden extraer una notable variedad de sonidos desde estos dos simples tambores. Su expansión gracias a la popularidad de la música de baile de América Latina, los ha hecho omnipresentes en las orquestas de baile modernas de hace varias décadas. Su sonido y ritmo acentúan el Cha-Cha-Cha, y aportan mucho empuje y sabor a la Salsa...

Bongos

El Djembe (pronunciado ‘jem-bay’) es lo que se conoce por la característica percusión de taza de la etnia guineana Mandingo. Es el tambor más popular del continente africano. El casco con forma de copa está cubierto de piel rapada de cabra y se toca con las dos manos enganchado con una correa al cuerpo. En el casco también se pueden fijar una sonajas que vibran al tocar. Golpeando más cerca del aro o del centro del parche se consiguen nuancias poco convencionales, que en el entender musical europeo pueden extraer tonos „impuros“. Esto nos recuerda que los conceptos estéticos sonoros vocales e instrumentales europeos y africanos son esencialmente distintos. Un motivo importante de ello es que los instrumentos musicales en África no solo están al servicio de la producción musical. Por eso la pureza de sonido y la perfección melódica no están en primer plano, sino que muchos instrumentos tienen, en parte todavía hoy en día, un papel social primario en la vida cotidiana.

Como instrumento de percusión en la música moderna el Djembé se toca con las dos manos, que según su posicionamiento sobre el parche pueden aportar diferentes coloraciones sonoras (más grave Bass, medio Open y más alto Slap). Con ello el Djembé puede emplearse como instrumento solista y de acompañamiento.

El Djembe

A primera vista, el Bougarabou (pronunciado ´Bugarabú´), tiene un aspecto que se antoja muy similar el del Djembé. Para su afinación también se emplea un sencillo cordal que al tensarlo aplica presión al parche. Su forma y su parche de piel de vaca proporcionan un sonido cálido y terroso, que recuerda en algo al sonido de la Conga. El espectro sonoro abarca desde profundos bajos a penetrantes agudos, también similar a los tonos de una pequeña Conga. Pero los picos de agudos percutivos del bongó y también del Djembé, no son posibles de alcanzar del todo con el Bougarabou.

El Bougarabou

La Tabla es una percusión en forma de par asimétrico de pequeños tambores con gran expansión en la India central y del norte, Bangladesh y Pakistán. Es como una combinación entre un tambor cónico y otro cilíndrico, ambos con una piel tensada con diferente afinación. La presión de la membrana y la afinación del tambor que se toca con la mano derecha, el Dayan, se varía con un cordal de piel entre el cual se colocan pequeños cilindros de madera que aplican la presión. En el centro del parche se haya un círculo negro hecho con una pasta especial de arroz o polvo de metal, que garantiza la pureza de sonido. El otro tambor, que se llama Bayan y se toca con la izquierda, se tensa con nudos y se regula con un anillo de cobre. Ambos tambores se asientan en una especia de cojines rellenos de fibra vegetal. Las formas de atacar el instrumento (superficie de la mano, presión de las muñecas, dedos, yemas de los dedos), son muy variadas, y los virtuosos consiguen extraer del instrumento una auténtica cascada de sonidos y armónicos. La Tabla es el transmisor rítmico de la clásica música hindú, y puede desempeñar igualmente papel de solista, instrumental o de acompañamiento de voces.

Tabla

La Darbouka (nombre árabe) es también un tambor con forma de copa y una sola piel muy extendido en las regiones islámicas de Asia, Oriente Medio y norte de África. Los materiales de producción son sobre todo madera y metal. En Asia el intérprete lo sujeta de pie bajo el brazo izquierdo, o sentado entre los muslos. Se toca de dos formas: ligeramente apagado con la mano izquierda y fuerte con la mano derecha. La Darbouka es igualmente popular en Ensembles clásicos o de folclore, y también en la música de la calle. Existe en muchos países bajo diversos nombres y variaciones: Dümbelek en Turquía, Dombek en Irán, y Dombak en la música persa. En la orquesta europea se denomina tambor arábigo.

La Darbouka

Los „tambores parlantes“, o bien Talking Drums (por ejemplo kalengu en Hausa /Nigeria, dondo en Akan/Ghana), son tambores con forma de reloj de arena con pieles en ambos extremos. Por medio de un sistema de nudos que tensan las pieles entre ellas, se consigue „hacerlos hablar“, variando la presión entre ellas. Unos guijarros en los tambores producen además un efecto de sonajero. El instrumento se coloca bajo el brazo y el músico variando la presión del cordal imita el lenguaje hablado, tocando con los dedos y un mazo especial curvado.

En el África occidental y central se usan en parejas de tamaños diferentes con afinaciones ajustadas entre ellos. Aquí se refleja claramente la estrecha relación entre la fonética curva del lenguaje y la melódica curva de los sonidos. Gracias a estas características los Talking Drums se emplean en culturas remotas y tradicionales con un significado similar al de nuestros medios de masa, como por ejemplo la del pueblo Akan de Gahna.

Talking Drums

El DoumDoum (pronunciado ´Dumdum´) representa el latido del corazón dentro de la percusión africana. Los DoumDoums o tambores graves destacan por sus dos parches de vaca con pelo. Con un sistema de tensión por cordal se dejan afinar de forma sencilla estos tambores. Los DoumDoums se tocan con un mazo curvo. Tradicionalmente existen 3 tamaños: Kenkeni (aprox. ø30cm), Sangba (aprox. ø36cm) y Djunumba (aprox. ø40cm). El DoumDoum fundamentalmente se emplea como percusión de acompañamiento para el Djembe.

Los DoumDoum